Sandro Pozzi /12 de febrero del 2013
Es la guerra de divisas que nunca llega, aunque en Wall Street siguen los acontecimientos con atención. Los tambores vuelven a sonar con fuerza. El primer golpe en la reciente escalada lo dio Shinzo Abe, primer ministro japonés, quien la semana pasada pidió abiertamente a su banco central que adopte una política monetaria agresiva. El yen ha perdido un 13% de su valor respecto al dólar desde mediados de noviembre y está en su mínimo en tres años. Ahora, el grupo de las mayores economías industrializadas, el G-7, trata de lograr una tregua antes de que se desencadene la guerra.
LEER MÁS...