Francisco Aguayo /25/03/2013
I
Los efectos de la crisis financiera que estalló en el 2008, han
expandido la discusión acerca de la viabilidad del capitalismo. El
resquebrajamiento del sistema financiero internacional, sin embargo, no ha
llevado a una reforma del sistema sino a una administración de la crisis que
prolonga el estado de cosas sin ofrecer una solución. Esta falsa salida ha
transferido la carga de los bancos y las corporaciones hacia la población en su
conjunto, fracturando la confianza de sociedades que presumían haber alcanzado
la afluencia de forma irreversible y exponiendo a una buena parte de la
población de los países ricos a la precaria realidad cotidiana de la población
del resto de mundo.
LEER MÁS...