miércoles, 30 de noviembre de 2011

"La maldición del Oro Inca": Un documental sobre los orígenes fraudulentos de la Newmont Corporation y la Minera Yanacocha durante el régimen de Fujimori

Bryan Anthony Serrano /2/12/2011

The curse of Inca Gold  –“La maldición del oro inca”–  es un breve pero valioso documental producido por Front Line/World y grabado por el reportero del New York Times y profesor de periodismo de la Universidad de California, Lowell Bergman, en el 2005 que revela detalles importantes acerca de los orígenes fraudulentos de la historia “exitosa” de la Newmont Mining Corporation y la Sociedad Minera Yanacocha -la mina de oro más grande de América y probablemente del mundo- durante los años 90’s. El documental muestra como es que durante el régimen de Fujimori, el propio Vladimiro Montesinos jugaría el rol de “dirimente” para que la justicia peruana fallara a favor de la transnacional norteamericana y su ex representante Larry Kurlander, en la batalla que libraba con la francesa BRGM por la concesión de la propiedad de las acciones de la Minera, que como narra el documental, llegó a motivar incluso la intervención del propio presidente de Francia Jacques Chirac.  


El trabajo de Bergman, a propósito de las masivas protestas en el departamento de Cajamarca contra el proyecto Conga, aporta particularmente en la comprensión de los orígenes del poder económico y político de una de las transnacionales más poderosas en el Perú con un extenso historial de conflictividad con las comunidades y poblaciones locales, muchos de ellos relacionados con el nuevo planteamiento del problema de la tierra en el siglo XXI, que ahora más bien se hace extensivo al problema del agua y el de la contaminación ambiental. Efectivamente, el poder de la norteamericana Newmont en el Perú, y su socia, la Compañía de Minas Buenaventura de Roque Benavides, no hubiese sido posible si no se hubiese establecido sobre la base de una amplia cobertura de injerencia en algunas ramas fundamentales del  aparato del Estado y gracias a la actividad de los ejecutivos corporativos y los funcionarios del gobierno a través de sus lobbies y representantes.

Esta confabulación en las altas esferas del poder a su vez, va entretejiendo un círculo de influencia que se extiende a otros ámbitos como el económico, jurídico, político y legislativo con la designación de diversos funcionarios y profesionales que rotan periódicamente desde el sector privado hacia el sector estatal y viceversa introduciendo la misma línea política y administrativa funcional a la cúpula Corporación-Estado. Es lo que el investigador Francisco Durand desarrolla en su libro “El Perú fracturado: formalidad, informalidad y economía delictiva” (2007) como la captura del Estado por las Empresas Multinacionales (EMN) en órganos claves como el Ministerio de Economía (MEF) complementándose con “puertas giratorias” entre las corporaciones e instituciones del Estado responsables de la política económica (Como el IPE y el MEF) en donde sus miembros “entran y salen sean como ministros, viceministros o asesores”.

Este fenómeno que emergió durante la década de los 90’s, demuestra que si bien es cierto la dictadura política-administrativa fue ciertamente derribada en las calles con la protesta masiva de la población tras colapsar la descomposición del régimen por los altos niveles de corrupción o los crímenes de lesa humanidad; la dictadura Corporación-Estado como patrón de poder sobre las principales ramas de la economía y la política económica oficial (re-primarización de la industria e imposición de un modelo primario-exportador como palanca del crecimiento económico) en cambio se mantuvo casi intacta, logrando sobrevivir a todos los gobiernos de turno posteriores, adaptándose a cada ciclo político y convirtiéndose en la herencia fundamental del régimen fujimontesinista para las clases gobernantes.

Así, el patrón de relaciones de poder Corporación-Estado se nutría de una premisa básica: Estando el Estado “capturado” no habría porqué preocuparse de las protestas de “los de abajo” ya que la economía se encontraría desligada de los “ruidos políticos”. Y ésta fue precisamente la conducta de los gobernantes al profundizar durante los últimos quince años el patrón de relaciones de poder entre las transnacionales y el aparato del Estado. Sin embargo, este mecanismo también implicaría efectos contraproducentes: Mientras las relaciones “hacia arriba” se mantengan básicamente estables, las relaciones “hacia abajo” podrían transformarse en relaciones crecientemente inestables incrementándose el potencial del “riesgo país”, lo cuál ahora ha quedado rotundamente corroborado con la ebullición de los conflictos sociales y el desborde de las masas por la defensa de la tierra, el agua, los recursos naturales, el medio ambiente (que como señalamos más arriba son los nuevos elementos que se incorporan a lo que anteriormente constituía el plantemiento originario del problema de la tierra) poniendo en jaque a los proyectos de la gran minería como el de las minas Conga en Cajamarca; e incluso, cuestionando al propio modelo primario-exportador como palanca de la economía peruana.

La siguiente descripción pertenece a la nota del Grupo de Formación e Intervención para el desarrollo Sostenible (Grufides), previa a la presentación de “La maldición del oro inca”–  un trabajo que cobra plena vigencia en la coyuntura política peruana.

-----------------------------------------------
"La maldición del oro inca" (Lowell Bergman, 2005)

Mientras que en Perú ha quedado prácticamente sepultado el caso de los tratos que tuvieron Vladimiro Montesinos con el ejecutivo de la minera Newmont, Lawrence Kurlander, en Estados Unidos el programa “Frontline”, que emite la cadena PBS, y el diario The New York Times ventilarán pasajes oscuros de la operación que permitió a la corporación norteamericana adueñarse del asiento aurífero de Yanacocha, Cajamarca.

Luego de la cita con Kurlander, Montesinos se reunió con Beltrán. Der: Lowell Bergman, periodista que sigue el caso en EEUU.

En simultáneo, mañana el diario y la cadena divulgarán una minuciosa investigación que, según el periódico The Denver Post, contiene apreciables dosis de “intriga internacional, acusaciones de soborno, contaminación ambiental, campesinos enfermos, barras de oro, grabaciones secretas y la actuación de un retorcido negociador latinoamericano que salió de la fábrica de la CIA (Agencia Central de Inteligencia)”.

El documental que emitirá PBS, La Maldición del Oro Inca, ha sido producido por Lowell Bergman, el periodista ganador del premio Pulitzer que destapó la corrupción en la industria tabacalera y cuya historia relata la película “El Informante” (The Insider).

Lowell Bergman
Precisiones

COLORADO. En la capital del Estado, Denver, los abogados norteamericanos de los campesinos de Choropampa han conseguido que un tribunal acoja la denuncia contra Newmont por el caso del derrame de mercurio.

SUSTENTO. Una de las razones esgrimidas por los defensores de los choropampinos para que se ventile el proceso en Denver es que Newmont ha dado muestras de control del sistema judicial peruano. Entre las evidencias entregadas se encuentran el audio Montesinos-Kurlander y el vladivideo Montesinos-Beltrán. El caso aún no termina.

Un hombre clave que se apellida Kurlander

El reportaje de investigación La Maldición del Oro Inca “proporciona una mirada entre bambalinas de cómo una multinacional hace negocio en un país en desarrollo atravesado por la corrupción”, informó Lowell Bergman,

Un personaje importante en la historia es el ex directivo de Newmont, Lawrence Kurlander, quien se reunió con Vladimiro Montesinos el 26 de febrero de 1998.

En el encuentro, el norteamericano le pide su apoyo para que la justicia peruana falle a favor de la minera  que se disputaba la propiedad de importantes acciones de la francesa BRGM. “Amor con amor se paga”, respondió  Montesinos a Kurlander, quien ofreció dinero e información de inteligencia a Montesinos.

Después de la cita secreta, en la que actuó como traductora la ex amante de Montesinos, Grace Riggs Brousseau, el ex asesor se reunió con el vocal supremo Jaime Beltrán Quiroga, como consta el respectivo “vladivideo”. Beltrán emitiría un voto dirimente a favor de Newmont.

Según Lowell Bergman, en el documental, Kurlander lamenta haberse reunido con Montesinos.

Newmont le tenía mucha confianza. A pesar del encuentro con Montesinos, la corporación envió a Kurlander de vuelta a Perú para que manejara el accidente que produjo un vehículo contratado por Yanacocha al derramar mercurio en el poblado de Choropampa, que causó enfermedades a un centenar de campesinos.

Otro personaje que aparece en La Maldición del Oro Inca es el ex subsecretario del Departamento de Estado para Asuntos Latinoamericanos, Peter Romero, quien, luego de hacer lobby para Newmont ante el gobierno de Alberto Fujimori, pasó al retiro y trabajó como asesor de la empresa minera.

“Es un documental con mucha emoción, y hay que verlo para creerlo”, dice el periódico The Denver Post.

No hay comentarios:

Publicar un comentario