Fue el tercer bombardeo del año; el segundo en dos días. El primero se produjo a fines de enero en dónde el régimen de Netanyahu cruzaba por vez primera una línea roja hacia una guerra más amplia involucrando a las potencias regionales. El nuevo bombardeo israelí en Siria marca una nueva fase de intervención abierta del imperialismo.
Richard Becker / 7 de mayo del 2013
Los ataques aéreos israelíes masivos el 5 de mayo cerca de Damasco marcan una nueva fase en la campaña encabezada por el imperialismo para derrocar al gobierno sirio.
Los ataques aéreos israelíes masivos el 5 de mayo cerca de Damasco marcan una nueva fase en la campaña encabezada por el imperialismo para derrocar al gobierno sirio.
Enormes bombas iluminaban el cielo de la madrugada y sacudían la tierra en la capital del país. Explosiones secundarias continuaron durante cuatro horas después. Fue el tercer ataque de los bombardeos israelíes este año, el segundo en dos días, y por lejos el más grande hasta el momento.
Más tarde ese mismo día, una comisión de la ONU reveló "sospechas fuertes y concretas" que la oposición y las fuerzas golpisats -no el gobierno- eran responsables de la utilización de gas nervioso sarín en la comisión sobre el caso sirio. Lo que contradice directamente las acusaciones de Estados Unidos y Gran Bretaña, que el gobierno Sirio siempre ha negado.
El ataque de Israel fue en "estrecha coordinación" con el gobierno de Obama, según un portavoz de la Casa Blanca. Es el último acto de una larga historia de Israel que actúa como una extensión del poder militar de EE.UU. llevando a cabo las misiones dónde Washington encuentre "inconveniente" para realizar en sí en un momento dado.
Los últimos ataques y el hecho de que no se informó de los aviones israelíes derribados por el ejército sirio podrían ser un factor que conduzcan a una gran guerra en el aire.
Los últimos ataques y el hecho de que no se informó de los aviones israelíes derribados por el ejército sirio podrían ser un factor que conduzcan a una gran guerra en el aire.
El senador John McCain, partidario especialmente rabioso de una nueva guerra de EE.UU. en Siria, respondió diciendo que "los israelíes parecen ser capaces de penetrar en ella [defensas aéreas sirias] con bastante facilidad." Llamó a los EE.UU. para destruir las defensas aéreas sirias "con misiles de crucero,. cráteres en sus pistas, ya que todos estos suministros, por cierto, de Irán y Rusia están llegando por vía aérea "
McCain es también un destacado defensor de una "zona de exclusión aérea" ("no-fly" de aviones sirios solamente) en grandes partes del país, que sólo se puede lograr con la destrucción rápida de las fuerzas y defensas aéreas de Siria. Esta iniciativa está avanzando claramente en Washington.
Gobierno y oposición sirios responderán a las incursiones israelíes
El gobierno sirio llamó a los ataques israelíes, "actos de guerra" y "violaciónes flagrantes del derecho internacional", y afirmó que confirmarán la complicidad de los gobiernos de Estados Unidos e Israel con la oposición armada.
Por otro lado, el New York Times (5 de mayo de 2013) informó que: "El Consejo Militar de los rebeldes buscó rápidamente capitalizar las explosiones. El Consejo emitió una declaración llamando a todos los combatientes de la zona a trabajar juntos, dejar a un lado las rivalidades y montar ataques contra las fuerzas del gobierno que hasta entonces se han mantenido sólidamente en la capital."
La Coalición Nacional de Oposición y las Fuerzas Revolucionarias, considerado el principal grupo de paramilitares y contras, culpó al gobierno sirio en sí de los ataques en un comunicado enrevesado, que decía textualmente:
"Las acciones de Israel, incluyendo los ataques preventivos para debilitar las defensas sirias, demuestran el temor de perder los años de paz por parte del régimen de Assad "
De acuerdo con este inigualable "razonamiento", el atentado de Israel sobre Siria debilitan al gobierno de Assad por su temor de perder el gobierno.
La falta de lógica de la declaración de la Coalición Nacional se debe a su falta de honradez fundamental. Debido a la profunda hostilidad entre la población siria hacia el racista y militarista estado de Israel, los líderes nacionales de la coalición deben ocultar su verdadera actitud hacia los ataques.
Israel y las consideraciones de EE.UU.
Mientras los grandes medios de comunicación retratan las últimas huelgas supuestamente destinadas a evitar que los misiles iraníes lleguen a la resistencia libanesa de la organización Hezbollah, el hecho de que hubieran múltiples explosiones en numerosos lugares, apunta hacia objetivos estratégicos más amplios.
Si Siria se venga de ésta última serie de ataques aéreos israelíes, Israel podría entonces actuar para destruir la fuerza aérea de Siria; una meta abiertamente discutida en Washington en los últimos días. Gracias en gran parte a los cientos de miles de millones en ayuda de EE.UU., Israel es la potencia militar en la región, aparte del propio gobierno de EE.UU., y cuenta con la superioridad aérea sobre otros países.
Si, por el contrario, Siria no responde a los ataques, el gobierno podría parecer débil, e incapaz de defender el país.
La escalada como la oposición sufren reveses
La agitación en Siria ha sido impulsada por una amplia gama de quejas, algunos legítimas, otros reaccionarias. Pero la rebelión armada hoy está inextricablemente ligada al imperialismo y a los regímenes más reaccionarios en el mundo árabe.
La escalada de la intervención imperialista en la guerra de Siria se está acelerando ahora, debido a las pérdidas sufridas por las fuerzas de la oposición astillados en las últimas semanas. Y no es porque el "Ejército Sirio Libre", el "Mando Supremo Militar", la "Coalición Nacional de la oposición siria y las Fuerzas Revolucionarias", el "Jabhat al-Nusra", y otros grupos de la oposición no hayan recibiendo un apoyo masivo de los Estados Unidos, Gran Bretaña, Francia, Turquía, Arabia Saudita, Qatar y demás.
Los EE.UU. y sus aliados han estado canalizando grandes cantidades de armas, dinero y suministros a la oposición, y la formación de miles de combatientes contra el gobierno de Turquía, Jordania y otros países. Además de sanciones económicas duras que se han impuesto Siria.
El apoyo externo ha sostenido la oposición, pero no lo llevó más cerca de la victoria. Por lo tanto los llamamientos repetidos y urgentes de los líderes de la oposición para una guerra aérea imperialista contra su propio país caen por su propio peso.
Al igual que en el caso de Libia, algunos en la izquierda aquí, incluso algunos que se llaman a sí mismos "socialistas", han tomado la posición absurda y contradictoria de apoyar a la "revolución" en Siria, mientras que se oponen a la "intervención extranjera" siendo exigentes con la "revolución".
Los ataques aéreos israelíes siguen una semana de escalada retórica de guerra de la Casa Blanca y el Congreso. Ahora es el tiempo para desplegar el movimiento contra la guerra, el alzamiento de la gente y de todos los que defienden la justicia para rechazar la propaganda guerrerista que emana desde Washington, y de juntos de pie decir: "No a una nueva guerra contra Siria! ¡Estados Unidos fuera de Oriente Medio! "
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